1. Peso propio: Las construcciones con estructuras metálicas son más livianas por las propiedades de su masa, evidentemente son más ligeras que la que otro tipo de materiales. El concreto es mucho más voluminoso.
2. Velocidad de construcción: La recuperación del capital es mucho más rápida, ya que los tiempos de construcción son inmensamente más reducidos y eso permite que la amortización sea más eficiente. Es muy evidente en construcción de estructuras metálicas la diferencia en velocidad contra el concreto.
3. Rescate en estructuras metálicas: Una de las ventajas es que pueden ser desmontadas con sus perfiles y se pueden y utilizar nuevamente.
4. Modificaciones más sencillas: Los cambios estructurales son más simples, rápidos y eficientes.